Se durmió tarareando
una dulce melodía,
observando las estrellas,
en silencio, sonreía...
Tarareaba su nombre
con lo acordes precisos,
mientras sus ojos lloraban
y se ahogaba en sus suspiros...
Cantaba muy despacito,
sin que nadie la escuchara,
se le escapaba la vida
en cada letra cantada...
-Ya no escucho a los jilgueros
cantar junto a mi ventana,
ni me saluda el jazmín
por la noche, en mi terraza...
En esta noche sin luna
se esta llevando mi magia,
una elegante señora,
lleva por nombre, Nostalgia-...
Se durmió tarareando
una dulce melodía,
con lágrimas en los ojos
de tristeza, se moría...
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